viernes, 15 de julio de 2005

Pero... ¿cómo explicárselo?

Hoy una compañera de trabajo me ha dicho que no tiene ninguna ilusión de que llegue el fin de semana. Cuando me he enterado de que vuelve a vivir en casa de sus padres he comprendido el porqué.

¡Qué estúpidos somos a veces por no darnos cuenta de que la felicidad está en nosotros mismos!

No hay comentarios: