sábado, 2 de mayo de 2009

Aunque soy poco observador, reconozco que me llama la atención cuando descubro que ese recién conocido es también zurdo. Y es que por mucho que uno pretenda ir de original o de independiente o de "loquesea", al final a mí, como al resto de los humanos, terminan por caerme bien aquellos con los que tengo algo en común.

Es por ello que he de reconocer que me alegro aún más cuando me encuentro con que esa persona es doblemente "zurda".

3 comentarios:

odraz dijo...

Al leerte, no sé por qué, me ha surgido la siguiente curiosidad absurda:

¿Qué pensarías de una persona ambidiestra?

itsasbeltza dijo...

Dependería de para qué usara la "derecha"...

odraz dijo...

Interesante respuesta...