martes, 10 de marzo de 2009

Era invierno... De esos días en que la niebla se te mete en los huesos, recordándote que aún resta demasiado para el primer bañito en el mar.

Un tanto de Zidane metió al Real Madrid por última vez en cuartos de final de la Champions.

Algunos apuntaban que "había motivo".

Algo en mi vida empezaba a cambiar. Tras una larga crisis (por motivos de lo mas diversos), iba poco a poco recomponiendo los cimientos de una existencia que un vendaval había derribado sin piedad. Sin avisar. Sin...

Hoy, en la distancia, reconozco que todo lo que se desencadenó los días posteriores no fue ni mucho o menos lo que me hizo cambiar el rumbo. El viraje ya se había producido bastante antes, y la triste contemplación de la realidad demostró que iba en la dirección adecuada.

Aún así un día después no volví a ser el mismo.

No hay comentarios: