miércoles, 6 de septiembre de 2006

En las olimpiadas dicen que no hay nada peor que quedar en el cuarto puesto, es decir, al borde de las medallas pero sin ella. No estoy de acuerdo. No es que me vaya a poner a defender el dicho de que "lo importante es participar", que lo es... pero quien aquí escribe en sus años mozos tuvo que conformarse muchas ocasiones con ese puesto, y le ha servido para aprender que la distancia que separa el "triunfo" del "fracaso" es muy difusa, que no todo en esta vida es ganar, y que en última instancia es más feliz áquel que sabe que lo ha dado todo de sí, con independencia de los logros alcanzados.

No hay comentarios: