martes, 13 de diciembre de 2005

Vampiros

Un bebé de apenas seis meses ya es capaz de destruir una torre de naipes de tres pisos. Ese mismo bebé tardará varios años en poder levantar una torre similar.

Esto viene a cuento porque creo que siempre fue más fácil destruir que construir, decir que tus palabras, comentarios, blog, libro son una mierda a poner su granito de arena o dar su brazo a torcer para que las cosas cambien.

Hay personas, que son destructivas por naturaleza, que han hecho de la crítica su modo de vida, o simplemente se divierten tocando las narices al prójimo. Aunque no lo parezca, soy blanco fácil para ese tipo de personas, pues normalmente en cuanto las veo venir las dejo hacer e interpretan mis silencios como una victoria, eso en ocasiones provoca que reincidan y claro... llega un momento que mi paciencia se agota.

Pero no os llevéis a engaño... Hoy no es de esos últimos días, simplemente que mi mente se puso a divagar.

No hay comentarios: