- Oye tú...! que nos cierran el chiringuito y nos mandan para el cielo.
- Joer!, con lo tranquilo que se estaba aquí sin que nadie nos agobiase...
Pues sí. Esa es quizá la consecuencia más trágica que a mi entender tiene la decisión de las altas esferas teológicas de suprimir el limbo. Aunque pensándolo bien la decisión me parece acertada, pues ya no habrá la urgencia de bautizar al niño por si acaso... con lo que a partir de ahora las adhesiones a la Iglesia serán libres y voluntarias.
- A ver... Alfonsito, creo que ya tienes la edad suficiente para decidir si quieres bautizarte o no.
- ¿Qué me vais a regalar?
- La Play Station
- Venga!!!
Y ahora en serio... ¿Qué coño haremos ahora los que siempre hemos vivido "en el limbo"?
3 comentarios:
Montar un bar que se llame así. Estaría justo al lado de otro llamado "Por ahí", para un público más adolescente. Muxu bat!
Y enfrente el "Purgartorio" donde está la marchukiii...
Chicos!, me enterado de que las copas en "El averno" están más baratas...
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