Siempre creí que la ciudad de la luz era a la vez tan bella, tan arrogante y tan soberbia que en absoluto necesitaba el sol para brillar con luz propia.
Tras dos visitas en temporada estival, hace unos días saldé una deuda pendiente, visitarla justo en los días en los que la caída de la hoja la hacen (si cabe) más bella.

Eso sí.... dos días no dan para mucho. Y pese a que Míguel Angel sea el mejor guía turístico que nunca nos pudiéramos echar, hay que reconocer que no hemos tenido tiempo ni para enfocar correctamente la cámara. O sí....!!!

En fin... ¿Por dónde prefirías perderte conmigo?
Tal vez en la Torre Eiffel?

...en Notre Dame?

..fotografiando las escaleras de Montmartre?

... en la Place de la Concorde?

... visitando el Instituto del Mundo Árabe?

... en el Centro Pompidou?

... o pervirtiéndote en antros de "dudosa" reputación?

Aunque quizá seas de los que prefieras sea perderte entre libros, tomar un café en un Bistrot o discutiendo con el chulo y borde empleado de una estación de tren...

